Comprar RELACIONES

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lunes, 25 de junio de 2012

Antes de que mañana pase todo de nuevo


Mañana volveremos a tener los mismos miedos, y los mismos dolores de rodilla.
Un poco de hambre y de sueño al despertar
Algo de desolación al acostarnos.

Las ventanas, eso sí, se abrirán como siempre se abren
Las margaritas y los crisantemos
Como crece el pasto
Y como el sol gira

Las almohadas caerán  hacia un costado
Como las cabelleras
Y tendrán su nombre todas las cosas
Todas las estrellas

Tendremos sueños y tendremos sueño
Cansancio y amistades a deshoras
Tendremos deudas y tendremos palabras
Para ponerles a esos espacios vacíos
Que hay entre los sentimientos contrapuestos
Cuando vos te vas
Y yo apenas estoy volviendo.

Fernando Berton
Copyleft: Junio 2012


sábado, 23 de junio de 2012

Con River, ¿ascendemos todos?

River festeja el regreso a la Primera A

         

Hace poco menos de un año, escribí "Con River descendemos todos" , en el que planteaba que este grande del fútbol argentino no supo mantenerse en la A gracias a todo su poderío, tanto económico como deportivo, que había conseguido en su mas que centenaria historia.
        En esta tarde, River consiguió el torneo Nacional B, y con esto logra el tan ansiado regreso a la Primera A, al así llamado "fútbol grande".
        Pasaron muchas cosas, deportivas y de las otras. Empezando con un arranque tibio, con varios empates, y un técnico que ofrecía desmesuradamente rápido "dar un paso al costado" -allá por la sexta fecha, cuando todavía no estaba del todo asumido que el torneo por el ascenso es un campeonato largo, de dos ruedas-; derrotas insospechadas con Aldosivi y Boca Unidos en la primera rueda, triunfos resonantes y la consolidación de un jugador enorme como Trezeguet.
       Sin embargo, todas estas circunstancias no son ni mas ni menos que las mismas de cada campeonato, sea este el que fuese, sin quitarle ni un poco de la trascendencia que tiene que el otro gran club argentino haya logrado el campeonato directamente, sin promoción, a pesar de los tropiezos propios de los nervios de las ultimas fechas.
      Lo que hace que con River solamente ascienda River (y Quilmes, claro, pero es otro el tema), son todas las mismas cuestiones que rodean al fútbol, y que no han cambiado ni un poco. Desde aquel comienzo con la cancha suspendida varias fechas, -aunque no tantas como se hubiera esperado de haber seguido los ejemplos de Nueva Chicago y Almirante Brown-, a esta ultima muerte en la tribuna Sivori, no se ha modificado mucho. La violencia sigue siendo cosa de todos los fines de semana. Los poderosos siguen teniendo privilegios a la hora de impartir "justicia", tanto que hubo un conato de un mamarracho de torneo con 40 equipos de todas las categorías y no sé cuántas pavadas semejantes, que a dios gracias termino en una Copa Argentina bastante mas digna que aquella payasada, -que deja una final con dos grandes también, Boca y Racing, aunque puede que ese sea otro tema-; y poco y nada de nuevos posibles clubes o torneos con otras perspectivas que permitan soñar con una Liga Argentina como aquella que imaginé


       Ah, lo que no dije en aquel  texto de Saramago que menciono es "Un Azul para Marte". El link es a un blog que se llama "cuerdos de atar" y que me pareció gracioso el nombre, pero originalmente se encuentra en un compilado de relatos que se llama "Las maletas del viajero", y que recomiendo, de paso, que lean..

viernes, 22 de junio de 2012

La Doctrina del Shock


 "Basada en el libro de Naomi Klein, "La doctrina del shock" trata del auge del llamado 'capitalismo del desastre'. Éste insta a los gobiernos a aprovechar periodos de crisis económicas, guerras, desastres naturales, ataques terroristas y epidemias, para saquear los intereses públicos y llevar a cabo todo tipo de reformas a favor del libre mercado. Medidas tan despiadadas que sólo han podido imponerse mediante el miedo, la fuerza y la represión. La película rastrea los orígenes de este capitalismo salvaje en las teorías radicales el Premio Nobel de Economía Milton Friedman y su posterior implementación en todo el mundo, desde las dictaduras en Chile o Argentina de los años 70, a la Gran Bretaña de Margaret Thatcher, la Rusia de Yeltsin, o las no tan lejanas invasiones neoconservadoras en Afganistán e Irak" (El resumen es el original del sitio en YouTube)

Vi este documental poco después de ver "Memoria del Saqueo", de PIno Solanas. No creo que vaya a suicidarme, pero en esta semana que estoy un poco tirado en cama por una afección pulmonar, la verdad es que me tiró un poco para atrás.

Sin embargo, recomiendo verlo. Realmente te da escalofríos, cuando las imágenes se repiten en lugares tan distantes como Chile, Iraq o Rusia. No digo que seamos pobres víctimas, pero sí que estamos un poco en las manos de estos pibes que no paran de ganar dinero a costa nuestra.

No sé muy bien cómo saldremos, y qué mundo le va a quedar a nuestros hijos. Pero espero que ellos puedan hacerlo un poco mejor.

jueves, 21 de junio de 2012

El Árbol de las Brujas

Ray Bradbury (The Halloween tree) 1972
Minotauro - 1978



The Halloween Tree, puede decirse, es un libro dirigido a un público infantil - adolescente. Pero, tratándose de Bradbury, llega bastante más allá.
No sé si es de lo mejor, o de lo que uno espera encontrar en este autor, pero tiene un trasfondo que, tal vez ahora, el viejo Ray estará meditando.
¿Por quién habrá donado un año?
A continuación, una cantidad de citas del libro que no pretenden ser una reseña ni tienen un hilo argumental, salvo que me llamaron la atención. Espero que las disfruten.




Pero de pronto el día se fue.
De debajo de todos los árboles salió la noche y tendió las alas.
(Pág. 11)

                Tom Skelton desapareció.
                Todos miraron. Vieron la figura pequeña que se precipitaba cuesta abajo por el sendero polvoriento, hundiéndose en cien millones de toneladas de noche acumuladas en ese inmenso pozo, ese sótano húmedo, esa garganta deliciosamente aterradora.
                Aullando, se zambulleron tras él.
                Desaparecieron.
                El pueblo quedó atrás atosigándose de dulzura.
(Pág. 23)

                Tumbas y más tumbas con pasadizos secretos, para que nunca los descubrieran, para que los violadores de sepulcros no pudieran robar las almas y los juguetes y el oro. Tú eres una momia, muchacho, porque así se vestían ellos para la Eternidad. Envueltos en un capullo de hebras, esperaban renacer transformados en bonitas mariposas en algún mundo remoto, un mundo hermoso y acogedor. Conoce tu capullo, muchacho. Palpa los extraños lienzos.
(Pág. 62)

-          … ¿Renacería el sol con el nuevo año o seguiría muerto? Los egipcios se lo preguntaron. Los cavernícolas se lo preguntaron un millón de años antes. ¿Saldrá el sol mañana cuando amanezca?
-          ¿Y es ese el origen de la Noche de las Brujas?
-          Esas largas meditaciones nocturnas, muchachos. Y siempre allí, en el centro, el fuego. El sol. El sol sucumbiendo para siempre bajo el cielo frío, aterrorizando al hombre primitivo. Aquella era la Gran Muerte. Si el sol desaparecía para siempre, entonces ¿qué?
“Y a mediados del otoño, mientras todo moría, los hombres-mono se agitaban en sueños, recordaban a los muertos del año anterior. Los espectros llamaban desde dentro de las cabezas. Recuerdos, eso son los espectros, pero los hombres-mono no lo sabían. Detrás de los párpados, en las horas tardías de la noche, aparecían los espectros de la memoria, saludaban, bailaban, y entonces los hombres-mono despertaban, echaban ramitas al fuego, lloraban, se estremecían. Podían ahuyentar a los lobos, pero no a los recuerdos, no a los fantasmas. Entonces se acurrucaban, rezaban pidiendo que llegase la primavera, vigilaban el fuego, agradecían a dioses invisibles las cosechas de frutos y bayas. “
(Pág. 64)

                En todos los villorios, chico, en todas las granjas de mala muerte que puedas encontrar se ocultan antiguas religiones. Habéis visto cómo fueron mutilados y talados los druidas ¿eh? Ellos se ocultaban de los romanos. Y ahora son los romanos, que alimentaban con cristianos a los leones, quienes corren a esconderse. Así es como todos esos descoyuntados cultos menores de todos los gustos y tipos, luchan por sobrevivir. ¡Ved cómo corren, muchachos!
            Y era verdad.
Por toda Europa ardían hogueras.
(Pág. 85)

-          Pero, deteneos a pensar: ¿Qué significa en verdad la palabra Bruja?
-          Bueno… - dijo Tom, cohibido.
-          Ingenio –dijo Mortajosario-. Inteligencia. Eso quiere decir. Conocimiento. De modo que cualquier hombre, cualquier mujer, con medio cerebro y ganas de saber algo tenía aptitudes ¿eh? Y así a cualquiera demasiado despierto, que no se ocultaba bastante, lo llamaban …
-          ¡Brujo! –dijeron los niños a coro.
(Pág. 87)

Cada uno de vosotros ha de prometer que dará un año. Naturalmente ahora no echaréis de menos un año, porque sois muy jóvenes, y tanteando vuestras mentes puedo ver que ni siquiera adivináis la situación final. Sólo más tarde, cincuenta años a contar de esta noche, o a sesenta años de este amanecer, cuando se os está acabando el tiempo y deseéis fervientemente uno o dos días más de sol y felicidad, entonces será cuando el seño D por Destino o el señor H por Huesos os presentarán la cuenta. O acaso venga yo mismo, el viejo Mortajosario en persona, un amigo de los niños, y os diga “pagad”. Así que un año prometido es un año perdido. Yo os diré “dad” y vosotros daréis.
(Pág. 126)

Significará que aquellos que podrían vivir hasta los setenta y uno tendrán que morir a los setenta. (…) Un año más o menos no parece gran cosa. Cuando llegue el momento, muchachos, puede que lo lamentéis. Pero podréis decir, este año lo pasé bien, lo di por Pip, se lo presté a la vida para el querido Pipkin, la más hermosa de las manzanas que estuvo a punto de caer del árbol antes de tiempo.
(Pág. 127)

Y la casa entera era como un compendio de las Noches de Brujas de todos los Tiempos. (…)
Los muchachos se reunieron alrededor de la lucerna y miraron el pozo de una escalera que llevaba a varios pisos de distintos tiempos e historias de hombres y esqueletos y músicas escalofriantes tocadas en flautas de huesos.
-          Allí está, chicos. ¿Queréis mirar? ¿Lo veis? Allí está todo nuestro vuelo de diez mil años, allí está todo nuestro viaje en un solo lugar, desde los cavernícolas a los egipcios, pasando por los pórticos romanos y las praderas inglesas de otoño hasta los osarios mexicanos.
(Pág. 131)

-          Siempre lo mismo pero diferente ¿eh? Cada época, cada tiempo. El día siempre acababa. Siempre caía la noche. ¿Y no es verdad que siempre teméis, tú, Hombre-Mono, tú, Momia, que nunca vuelva a salir el sol?
-          Sssííí´-susurraron varios más.
Y miraron arriba todos los niveles de la casona y vieron todas las épocas, todos los pisos, y a todos los hombres de la historia que escudriñaban alrededor mientras el sol salía y se ponía. Los Hombre-Mono temblaban. Los egipcios gritaban quejumbrosos. Griegos y romanos paseaban a sus muertos. Moría el verano. El invierno lo metía en la tumba. Un billón de voces lloraba. El viento de los tiempos estremecía la casa alta. Las ventanas trepidaban, y como los ojos de los hombres, estallaban en lágrimas cristalinas.
(Pág. 133)

-          Noche y día. Invierno y verano, chicos. Tiempo de sembrar y tiempo de recoger. Vida y muerte. Todo eso, sintetizado en una sola noche, es la Fiesta de las Brujas.
(Pág. 134)
Ray Bradbury (1920 - 2012)

miércoles, 20 de junio de 2012

"Componíamos canciones que iban a cambiar el mundo"

... dice Luis Alberto Spinetta en una parte de la entrevista que le hace Emilio del Guercio en el programa "Cómo Hice", del canal Encuentro (ver link: Cómo Hice ... Muchacha ojos de papel (programa de 2010) ) y remata: "Which was not true". 
      Y dice poco después que los artistas terminan siendo "decorativos"; y digo yo, que en parte es verdad, y agradecemos la decoración que nos permite la música de Spinetta (como la de tantos otros), o la literatura, o la pintura, o el cine.
      En efecto, no parece que el arte vaya a cambiar el mundo. O no del todo. pero es verdad que en aquellos años de Muchacha, había una efervescencia social como la que no se ha visto luego.
¿Qué pasó? No tengo forma de demostrarlo, pero sí de preguntarlo. ¿Habrá sido una reacción, acaso desmesurada, de las grandes corporaciones -económicas y políticas-, que veían en esos jóvenes de pelos largos que pregonaban el amor libre y el consumo de sustancias alucinógenas, un riesgo enorme de perder para siempre el control de lo que está bien y lo que está mal? ¿En ese miedo, se habrán urdido las tramas de las políticas de seguridad nacionales, los avances descomunales sobre los países productores de petróleo, sobre el este del muro de Berlín, sobre unas pobres naciones del sudeste asiático que tuvieron la mala suerte de luchar por años y años para, finalmente verse ganadores del bando que -parece- perdió?
     Tal vez sea mucho. Pero en esa síntesis que hace el flaco: "queríamos cambiar el mundo - cosa que no era cierta", está, para mi entender, la ruta que habrá que seguir  para desenredar la madeja, y ver qué se puede tomar de aquellos tiempos que todavía nos sirva para proyectarnos hacia el futuro. Es cierto que el progreso económico y el acceso a la tecnología son muy tentadores, y casi todas las personas queremos eso. Pero no lo es menos que la ambición desmedida de algunos sectores, han llevado a la humanidad a un punto en que el cambio de modelo parece imposible.
      Con la caída del comunismo, el mundo dejó de tener un equilibrio en las formas de pensar, y hoy  parece que sólo se puede pensar desde el capitalismo. Lo que no está claro es si ésta es la mejor forma de avanzar. Vale aclarar: eso está más que claro para los capitalistas, que han logrado enormes ganancias con el trabajo de los otros, dando muy poco a cambio, y además lo poco que dan se lo llevan por otro lado. 
       No está claro, digo, para los que salimos a trabajar todos los días, que queremos tener un buen pasar y darles uno también a nuestros hijos, disfrutar de la vida en familia y poder irnos de vacaciones y contar anécdotas de los maravillosos viajes que hicimos. Muchas veces a costa de no ver nunca a esa familia que amamos, a esos amigos que solo extrañamos, a esos fines de semana que no aprovechamos hartos de todo hartazgo por la rutina y las 12 o 14 horas que nos lleva el trabajo por día.
       Recomiendo fervientemente ver "Cómo hice" (también se puede ver por internet), porque, por ejemplo, ver el final con los cuatro Almendras cantando ese himno que viene desde tan lejos, es un placer que, al menos a mí, me llevó hasta las lágrimas.
       Y todas las reflexiones anteriores, que acaso no estén tan desentonadas, aunque lo parezcan.
       ¡Gracias Luis! ¡Hasta Siempre! 

domingo, 10 de junio de 2012

Nos han dejado sus vidas


En los últimos 15 meses se han ido varios grandes
David Viñas, el 10 de Marzo de 2011

Ernesto Sábato, el 30 de Abril de 2011

Luis Alberto Spinetta, el 8 de Febrero de 2012

Carlos Loiseau (Caloi), el 8 de Mayo de 2012

Mario Trejo, el 13 de Mayo de 2012

Carlos Fuentes, el 15 de Mayo de 2012

Ray Bradbury, el 5 de Junio de 2012.

A todos ellos les debemos nuestra gratitud por haber compartido con nosotros su pensamiento,
sus personajes, sus fulgores y sus tinieblas.

Un hermoso adiós o un hasta siempre a todos ellos.

martes, 5 de junio de 2012

Chacabuco y Av. Garay

Por Chacabuco, casi en la esquina con la Avenida Juan de Garay, hay un edificio que debe tener unos 70 años, por lo menos, y hoy está en demolición total (según dice un cartelito que le han puesto, si bien pareciera que han de respetar la fachada, y construir en su interior vaya uno a saber qué, pero que ojalá permita mantener la historia de lo que fue alguna vez).
Hace pocos meses, se podía ver en la fachada una pintura muy propia del comic, donde el artista nos muestra un clima de opresión (se autorrepresentó con la carra negra, la espalda encorvada, que da una idea de depresión, o tristeza).

El personaje principal lleva una máscara anti-gas, y sube por una hipotética escalera, acaso buscando escapar de la opresión que rodea el suelo (basura, mierda de perro, bolsas de basura rotas), las manos en los bolsillos de su tapado hasta los tobillos.
En otra visión, puede suponerse que busca la azotea en un intento de escapar de ese lugar que recuerda, acaso, tiempos mejores, como casi todo el barrio de San Telmo. (Algunos han sugerido que busca la azotea para tirarse de cabeza, y acabar de una vez con esta caída, que parece implacable, del barrio, en una alegoría que cuesta nada más, nada menos, que la propia existencia. Vivir sólo cuesta vida, el futuro ya llegó, siguiendo a los Redonditos)

Otras versiones indican que, dado que la máscara es blanca, y no tiene un gesto tan triste como el autorretrato, no es el final lo que busca, sino el comienzo de una nueva esperanza. (¿O es siempre única la esperanza, y está a veces más visible y otras menos?)

Poco después, se ha erigido un moderno edificio justo en la esquina, muy moderno, que nada tiene que ver con la arquitectura del barrio. Si acaso es esa la esperanza que busca el personaje, cobra más vigencia la hipótesis de la caída. Si la arquitectura de un barrio no tiene que ver con la identidad, entonces no es tan tétrico.

Queda ya poco de la pintura de la que hablamos aquí. Varios camiones han demolido el interior sin piedad. Una pared se levanta hoy donde estaba el artista. Queda el personaje, y un gato negro que hace caso omiso a unos perros, también negros, que parecen no poder alcanzarlo, y el felino no muestra ninguna preocupación. Quizás, todo el pasto que artificialmente se ha puesto en el edificio cercano, le venga bien para cazar pajaritos.

Vale, salud, y que la voracidad de los edificios permita mantener, al menos, esa fachada, y que se convoque de nuevo al artista que decoró la decadencia para contarnos otra página de su comic mural.

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