Alfa
En la ruta 297, unos 10 km antes de la entrada a Balcarce, el INTA tiene un criadero experimental de dragones. Se los reconoce enseguida porque vuelan en manga (como la langosta), y se te pegan de a montones en el visor del casco ya que les encanta viajar a velocidades inferiores a las del deseo (un dragón joven, en promedio, se desplaza entre 1.2 y 1.8 yearns); y así tan rápido como aparecen, se van, no sin antes agradecerte el viajecito con movimientos enérgicos de las colas, y dejan una pequeña estela de humo azul de metileno.
Beto
Rápido ruedan los carros del ferrocarril de diciembre a enero, el martes sigue al lunes y la noche, a la mañana.
Ciertas empresas de capitales pecaminosos han salido a competirle al criadero de dragones con sus avanzadas técnicas de reproductores de long-plays a 33 rpm (aproximadamente), y sostienen que el éxito comercial dependerá del apoyo irrestricto por parte de las masas multiplicadas por el cuadrado de la velocidad de la luz. Hay quienes opinan (yo, por caso) que eso es bastante relativo y que hasta tanto no se demuestre lo contrario, las cosas seguirán estando a favor.
En la ruta 297, unos 10 km antes de la entrada a Balcarce, el INTA tiene un criadero experimental de dragones. Se los reconoce enseguida porque vuelan en manga (como la langosta), y se te pegan de a montones en el visor del casco ya que les encanta viajar a velocidades inferiores a las del deseo (un dragón joven, en promedio, se desplaza entre 1.2 y 1.8 yearns); y así tan rápido como aparecen, se van, no sin antes agradecerte el viajecito con movimientos enérgicos de las colas, y dejan una pequeña estela de humo azul de metileno.
Beto
Rápido ruedan los carros del ferrocarril de diciembre a enero, el martes sigue al lunes y la noche, a la mañana.
Ciertas empresas de capitales pecaminosos han salido a competirle al criadero de dragones con sus avanzadas técnicas de reproductores de long-plays a 33 rpm (aproximadamente), y sostienen que el éxito comercial dependerá del apoyo irrestricto por parte de las masas multiplicadas por el cuadrado de la velocidad de la luz. Hay quienes opinan (yo, por caso) que eso es bastante relativo y que hasta tanto no se demuestre lo contrario, las cosas seguirán estando a favor.