Comprar RELACIONES
miércoles, 15 de febrero de 2017
martes, 14 de febrero de 2017
In preparation for take off - III
Hoja de Ruta |
Vacaciones, here I go!
En siete (7) simples pasos:
1) Relax. No hace falta mayor explicación. Ya lo dijo el Quixote: Sancho, reláxate y anda.
2) Calm down. Acá por ái hay que hacer alguna aclaración, porque no es lo mismo calm down que calm up. En promedio podemos decir que calm, cosa de no complicar mucho el tema.
3) Think! Que a todas luces tiene que ver con las inundaciones. O bien con los agradecimientos. No sé muy bien, prometo tener algo pensado para la próxima.
4) Enjoy! (Coca cola) O lo que venga. La idea es que no nos encuentre la semana sin haber pasado un rato agradable.
5) Read. Esto viene a cuento de una publicación anterior, que preguntaba: ¿cuántos libros habré de llevar? Yo creo que no muchos. Dos es un buen número, porque la idea es leer, claro, pero también generar materiales para lo que resta del año (2)
6) Write * Y sí. Tal vez sea este el punto principal. Least but not last, podríamos decir. ¿Vos y quién más podrían decir? Los personajes que aparezcan. ¿Y si no aparecen? Yo y mis frustraciones.
Mine, me, I
Febrero, MMXVII
notas
(1) Agente de Transporte Aduanero. (Qien pueda entender, que entienda)
(2) Que es una visión a todas luces pesimista, porque ya estimamos que el año resta. No hemos hecho ninguna encuesta, por lo que es algo incontrastable. Pero en tiempos de las posverdad, ¿a quién le importa?
(7) La vida, querido desprevenido lector, se hace en tres (3) y no siete (7) simples pasos. Deberías saberlo ya.
* As much as you can. It may occur that things will not happen as expected. This is only a will.
** It'll be like just starting over. Holidays, my dear, don't last. They're just an ephemeral sensation, when you feel free, happy, and Tuesday follows Monday seamlessly.
lunes, 13 de febrero de 2017
Los límites de la literatura
Muchas veces me he preguntado para qué sirve la literatura. He leído bastantes libros, de toda índole: poesía, cuento, novela. En menor medida teatro. También textos teóricos, de divulgación, autobiografias (por ejemplo la de don Enzo Ferrari), y hasta libros de autoayuda (como las ambulancias). Incluso he leído libros inéditos, cuentos y novelas de asistentes a talleres a los que asistí; y, créase o no, fui filtro de un jurado de un concurso literario alguna vez. Créase o no.
¡Qué oportunidad para que aparezca el lector desprevenido! Pero no, lamento. Me mandó un correo electrónico más temprano para decir que no estaba disponible hoy. Por razones personales. Y yo le creo, no hay cosa más atendible que las razones personales.
Bueno, dicho esto, tendré que arreglármelas sin el lector desprevenido. Decía recién que leí unas cuantas cosas, diversos estilos, géneros varios, más o menos estéticos, más o menos utilitarios. Si bien es cierto que la palabra siempre triunfa, y todo texto es, muy en el fondo, una estética; acaso una escolástica.
Yendo al tema: el pasado 3 de febrero (fecha patria, si las hay) se presentó en Caburé Libros Memento Mori, de Esteban Ierardo que es licenciado en Filosofía por la UBA. Y, como no podía ser de otro modo, nos deja pensando: ¿de qué se trata Memento mori? No se apure, che lector, a traducir rápidamente del latín. Todos sabemos que vamos a morir. Pero, ¿sabemos cómo vamos a vivir?
Y ahí, quizás, esté la clave de este libro de filosofía, que se vale de la literatura para divulgar su mensaje.
En la presentación estuvieron presentes otros escritores: el poeta Ces Le Mhyte, que de modo algo enrevesado nos puso en alerta de que algo raro pasa en el cuento (o relato, o texto, o ensayo) "La noticia".
Y luego, el escritor Guillermo Fernández nos dijo que a veces debemos tener cuidado con aquellos que al reseñar un libro nos dicen cuánto saben de otros libros que han leído, pero se les escapa lo que están leyendo; es decir, el libro reseñado.
Hasta aquí, está pasando algo de eso. Mucho prolegómeno y poco de Memento mori. Así que vayamos al grano.
El libro se inicia con el cuento (sin temor a equivocarme) "El gran cruce o La Serpiente del Arco Iris", que me recuerda a las historietas de Larguirucho, que solían tener títulos con "o". Y que es, ciertamente, es un cuento humorístico y que nos permite reflexionar entre lo analógico y lo digital, por decir así.
Y termina, justamente, con "La noticia" y "Memento mori"; que podemos decir que forman un tandem, no se entiende uno sin el otro. Y no se entiende el libro, tampoco. No digo que son la columna vertebral, pero casi.
Cito un par de frases de "La noticia" (que podrían parecer al azar):
"... nuevas propuestas de turismo aventura, como el turismo nuclear en Chernóbil" (Pág. 152)
" ... cómo posar para las fotografías de las revistas o las secciones frívolas de los portales online de noticias" (Päg. 152)
Y un par de "Memento mori":
"Y el dinero casi ilimitado del Estado permite financiar las campañas mediáticas insistentes para convencer a los infelices de que son felices." (Pág 169)
"... propagar la nube frívola del chisme para llevar la política e incluso la economía al terreno del entretenimiento." (Pág. 169)Este libro empieza por el humor (acaso negro), que sirve para relajarnos, y abordar el resto con la sonrisa a flor de labios. Sin embargo, a medida que avanzamos en los cuentos, notamos que la sonrisa tiene, a su vez, otra posibilidad, y es que así como así podría confundirse con la revolución de la alegría, si se me permite la expresión, como si no pasara nada.
Y bueno, no, señores, lamento decir que sí pasa. Que es importante estar atentos, todo el tiempo, porque muchas veces con sonrisitas de acá y sonrisitas de allá ¡zas!, te encontrás con que todo ha sido en vano, y lo que parecía un alegre Sueño de una noche de verano terminó siendo una tragedia de las peores.
Es por eso que recomiendo la lectura de Memento mori, porque detrás de una apariencia ingenua, de un camino lateral de la "gran literatura", nos encontramos con varias sorpresas, reflexiones, senderos escondidos y remansos en los que parar un rato, tomarse un mate y pensar que a veces lo que reluce no es oro. Como el color amarillo.
Fernando Berton
13 de febrero, mmxvii
jueves, 9 de febrero de 2017
In preparation for take off - II
Irse de vacaciones siempre es un placer. Y preparar el viaje con cierta
anticipación, un nerviosismo.
¿Será el viaje todo lo que uno espera? ¿Habrá tiempo para tomar suficiente aire? ¿Despejar la mente? ¿Cuántos libros llevar? ¿Estará bien el clima? ¿Estará bien que, al contrario del sujeto de la práctica artística tradicionalmente, que ha deseado permanecer oculto, invisible [1], yo esté exponiendo mi plan así sin más? ¿Estaré esperando la mirada maligna de los otros para, entonces, decir "no entienden nada"?
Puede ser que un poco de todo eso, y también la necesidad de aislarme un tiempo, generar cierta calma que en el día a día se va perdiendo; escaparle a la presión de rogar que el tren no se retrase, que no venga tan lleno, que la puerta quede más o menos cerca como para no viajar tan apretado, que si, de ser eso inevitable, se pueda por lo menos abrir el libro y lograr la distancia suficiente como para hacer foco y no distraerse en la mirada color miel que llega desde unos ojos reflejados en el vidrio de la puerta y que están como esperando que caiga la guillotina o se dispare un mecanismo que la transporte a otros mundos.
Mientras tanto, los días transcurren y se escapan de entre los dedos. La idea de las vacaciones (conquista de las clases asalariadas bien entrado el siglo XX) hace que se pueda soportar el resto del año. Así que para estas vacaciones vengo preparando un viaje que tendrá como objetivo hacer lo que mayormente no hago, que es estar de aquí para allá sin rumbo aparente, y vivir tranquilamente mi vida off-line.
Pero claro, al regreso, espero poder “irrumpir” nuevamente en el mundo en línea, salir del ostracismo al que voluntariamente me someteré para escribir cosas, tomar fotografías, parar a la vera de un camino si hace falta, escribir una hoja de ruta para luego, si corresponde, no cumplirla, y cosas por el estilo.
No se asuste el lector desprevenido, no se notará la ausencia, dado que este blog tiene la particularidad de no mantener una periodicidad; se nota enseguida que es una publicación espasmódica, sin orden y sin progreso. Pero con cierta gracia, en ese discurrir por temas diversos mayormente rodeados en la literatura.
Al menos, es lo que a mí me parece.
¡Salud!
Yo, mí, mío
Febrero, mmxvii
¿Será el viaje todo lo que uno espera? ¿Habrá tiempo para tomar suficiente aire? ¿Despejar la mente? ¿Cuántos libros llevar? ¿Estará bien el clima? ¿Estará bien que, al contrario del sujeto de la práctica artística tradicionalmente, que ha deseado permanecer oculto, invisible [1], yo esté exponiendo mi plan así sin más? ¿Estaré esperando la mirada maligna de los otros para, entonces, decir "no entienden nada"?
Puede ser que un poco de todo eso, y también la necesidad de aislarme un tiempo, generar cierta calma que en el día a día se va perdiendo; escaparle a la presión de rogar que el tren no se retrase, que no venga tan lleno, que la puerta quede más o menos cerca como para no viajar tan apretado, que si, de ser eso inevitable, se pueda por lo menos abrir el libro y lograr la distancia suficiente como para hacer foco y no distraerse en la mirada color miel que llega desde unos ojos reflejados en el vidrio de la puerta y que están como esperando que caiga la guillotina o se dispare un mecanismo que la transporte a otros mundos.
Mientras tanto, los días transcurren y se escapan de entre los dedos. La idea de las vacaciones (conquista de las clases asalariadas bien entrado el siglo XX) hace que se pueda soportar el resto del año. Así que para estas vacaciones vengo preparando un viaje que tendrá como objetivo hacer lo que mayormente no hago, que es estar de aquí para allá sin rumbo aparente, y vivir tranquilamente mi vida off-line.
Pero claro, al regreso, espero poder “irrumpir” nuevamente en el mundo en línea, salir del ostracismo al que voluntariamente me someteré para escribir cosas, tomar fotografías, parar a la vera de un camino si hace falta, escribir una hoja de ruta para luego, si corresponde, no cumplirla, y cosas por el estilo.
No se asuste el lector desprevenido, no se notará la ausencia, dado que este blog tiene la particularidad de no mantener una periodicidad; se nota enseguida que es una publicación espasmódica, sin orden y sin progreso. Pero con cierta gracia, en ese discurrir por temas diversos mayormente rodeados en la literatura.
Al menos, es lo que a mí me parece.
¡Salud!
Yo, mí, mío
Febrero, mmxvii
jueves, 2 de febrero de 2017
¿cómo se dice?
Adivina adivinador |
i don't have a previous government, for instance, whom i can blame for my mistakes.
let's say in 1984 i was ruled by someone else, so i pissed it off with that beautiful, curly, smart girl.
if that were the case, i could perfectly say now: "it's due to that insidious girl who made me beleive i was nothing"
was that the case? was she insidious? was i so stupid?
perfectly no
i mean, that was not the case. she was not insidious.
some years after that day, you can find me here again. still sitting here, at the barber's shop, and all the people that come and go stop and say hello.
i'm robbing somenone of that verse.
it's your responsibility, as an insidious reader, to discover who i'm robbing.
see ya! take care!
i, me, mine
february, mmxvii
PS: hay pocas versiones de canciones de los beatles que me gustan.
PS 1: no importa mucho si me gustan, esto no se trata de la post-verdad.
PS 2: si uno mira la foto que ilustra este artículo, tal vez tenga una pista de la canción a la que se refiere. es cuestión de esforzarse un poco, nomás.
martes, 31 de enero de 2017
siendo la hora que es
cuatro, cuatro y media, entonces.
tampoco estaba, no sé qué decirle.
fuimos, llamamos, esperamos.
no salió nadie mientras estuvimos ahí esperando.
lo trajimos de vuelta, ¿qué ibamos a hacer?
está en la jaula, detrás de las cortinas.
no tiene ni un rasguño.
algo cansado puede ser, el viaje fue largo.
fuimos y vinimos.
hay bastante tráfico a esta altura del mes.
el jueves.
antes va a ser imposible.
tenga en cuenta las circunstancias especiales.
de cuatro a cuatro y media, es lo que pactamos.
no va a ser posible antes, como le comentaba.
entre todos podemos llegar a un acuerdo.
tiene que haber buena predisposición, nada más.
sin duda.
usted tiene razón.
nosotros también la tenemos.
póngase en el lugar.
no, si no quiere nadie lo obliga.
es una sugerencia, una opinión.
bastante tenemos con lo nuestro.
pero hacemos el esfuerzo, lo intentamos.
a veces no nos sale, pero muchas veces sí.
mire alrededor.
respire hondo, no se apresure.
vísteme despacio que estoy apurado.
el miércoles no se trabaja, usted sabe bien.
queda para el jueves.
además, ya le dije, está cansado.
con estrés, seguramente.
es mucho el viaje y para nada.
estar ahí, al rayo del sol, esperando.
y con tanto para hacer.
ahora descansa.
no se haga problema, se lo aseguramos.
pero si no quiere, no; y damos el asunto por terminado.
fernando berton
enero, último día, mmxvii
tampoco estaba, no sé qué decirle.
fuimos, llamamos, esperamos.
no salió nadie mientras estuvimos ahí esperando.
lo trajimos de vuelta, ¿qué ibamos a hacer?
está en la jaula, detrás de las cortinas.
no tiene ni un rasguño.
algo cansado puede ser, el viaje fue largo.
fuimos y vinimos.
hay bastante tráfico a esta altura del mes.
el jueves.
antes va a ser imposible.
tenga en cuenta las circunstancias especiales.
de cuatro a cuatro y media, es lo que pactamos.
no va a ser posible antes, como le comentaba.
entre todos podemos llegar a un acuerdo.
tiene que haber buena predisposición, nada más.
sin duda.
usted tiene razón.
nosotros también la tenemos.
póngase en el lugar.
no, si no quiere nadie lo obliga.
es una sugerencia, una opinión.
bastante tenemos con lo nuestro.
pero hacemos el esfuerzo, lo intentamos.
a veces no nos sale, pero muchas veces sí.
mire alrededor.
respire hondo, no se apresure.
vísteme despacio que estoy apurado.
el miércoles no se trabaja, usted sabe bien.
queda para el jueves.
además, ya le dije, está cansado.
con estrés, seguramente.
es mucho el viaje y para nada.
estar ahí, al rayo del sol, esperando.
y con tanto para hacer.
ahora descansa.
no se haga problema, se lo aseguramos.
pero si no quiere, no; y damos el asunto por terminado.
fernando berton
enero, último día, mmxvii
lunes, 30 de enero de 2017
patas arriba
ella está patas arriba. y ella está patas abajo. nos vemos entrecortados, porque la señal no es buena después de medianoche. no hay nada que hacerle, la verdad empírica es superior a cualquier hipótesis hipotético deductiva.
de modo tal que no llegamos a horario.
puede ocurrir que un tercio de los estudiantes sepan de qué va la materia, otro tercio esté más o menos al tanto y un tercer tercio no tenga la más pálida idea. en ese caso, los estudiantes del primer tercio, ¿tendrían una bronceada idea? ¿qué tendrían los del segundo tercio?
cambiábamos figuritas con el remanido mantra late-nola, hasta que la tarde se hacía nochecita y un grito indicaba que había que volver. y a veces no se volvía, a riesgo de recibir un coscorrón, una cachetada oblicua entre el pasillo y la puerta del cuarto. cuando no una buena patada en el culo.
ya vendrán tiempos mejores. vendrán mejores escrituras. se podrá salir de noche sin temor a ser violentado. se podrá ser quien uno es sin tener que dar explicaciones.
mientras tanto, las cosas siguen patas arriba.
fernando berton
enero, mmxvii
Suscribirse a:
Entradas (Atom)
Entrada destacada
Inteligencia Artificial
¡Hola! Soy el robot, ¿cómo estás? ¿Cómo puedo ayudarte esta mañana? Tengo un sinnúmero de funciones entre las que se pueden contar ayuda fi...
-
Hoy venimos a presumir un poco, ya que el cuento "En la URSS" fue seleccionado para figurar en la antología de la primera versión...
-
Las fábricas de papel y de lápices producían regularmente, pero de pronto tuvieron un exceso de producción, ya que el usuario había caíd...
-
Imagen: Mubi - Rotting in the sun - Sebastián Silva; 2023 Sometimes I wish I were a cannibal, less for the pleasure of eating someone than...