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domingo, 24 de abril de 2016

Situación de sueño

Hace ya unos cuantos años, en este mismo blog publicaba un artículo que se llama Situación de calle
Allí me refería a la entonces canditata a vicejefa de la ciudad de Buenos Aires, y hoy gobernadora de la provincia idem.


Personas en situación de calle

El tema, sugerido más que dicho en el citado artículo, era el eufemismo, ¿nocierto? Para ello, ponía a los perros de la calle al lado de un señor en situación de calle. Y hablaba de mis necesidades básicas satisfechas, según el faraón Maslow. (Bueno, todo aquél que tiene una pirámide merece ser faraón, ¿o no, Yoko?) Porque, ¿qué cosa es la "situación de calle"? ¿Hay perros en situación de calle? No: hay perros de la calle; que hasta película tienen.
Pero no está bien decir gente de la calle. Porque enseguida nos remite a que no tienen un lugar donde vivir. Y no tener un lugar donde vivir es no tener un lugar donde bañarse, donde dormir, donde satisfacer las necesidades básicas, esas que están en la base de la pirámide de Maslow. Y no está bueno hablar de esa gente, porque para ellos "el gobierno va hacer algo, va a presentar un proyecto, va a convocar a los gremios" (mientras que, en contraposición, ya se les pagó a los buitres, se bajaron las retenciones, se liberó el tipo de cambio, se lamenta por cómo suben los precios).

Hace unos días, el 21 de abril de 2016, en el programa Minuto 1 que conduce el periodista Gustavo Sylvestre, la diputada del PRO Gladys Gonzalez dijo una cosa semejante: "gente que pasó a situación de desempleo".

Le planteo al lector desprevenido que suele pasar por estas páginas que se tome un momento para analizar la frase en cuestión.

Pregúntese, querido y desprevenido lector, ¿qué quiere decir situación de desempleo?

Y pregúntese, a continuación: ¿cómo hace una persona para pasar a situación de desempleo?

Da toda la sensación de que esa persona ha decidido llegar a tal situación. Algo así como decir que pasará a tomarse vacaciones, o pasará a visitar a su abuelita, ¿nocierto?

¿No es de un cinismo enorme decir semejante oración? Pero sin importar si es que sí o no, lo que semejante frase nos dice es que hay gente pensando en cómo decir las cosas. No es que alguien echó a alguien más de su trabajo. Es que el actual desocupado DECIDIÓ (por sí mismo, entiéndase) PASAR A SITUACIÓN DE DESPIDO. O sea, se levantó una mañaña y dijo "vieja, la verdad es que estoy harto, hoy voy a pasar a situación de despido". "¿Te parece, bichi?", dirá, con casi total tranquilidad, la esposa. A lo que el señor contestará "sí, qué se jodan, a mí no me echa nadie".

Entonces, para que quede claro, cuando alguna oración no le suene, es porque no suena. Es porque están forzando la realidad, como intenté contarle en otra entrada anterior sobre el recorte de una imagen.

Dicho para el lector muy desprevenido: no hay personas en situación de despido. HAY DESPEDIDOS. Y el que despide es el patrón, o sea el que te contrata, es decir el que tiene la potestad de terminar con el empleo. Porque si el trabajador renuncia, dice renuncié y listo, no anda diciendo "dejé a la empresa en situación de un empleado menos", ¿no le parece?

¡Salud!

lunes, 25 de marzo de 2013

El arte de vivir bien - 5


Capitulo 5


Violante era tan bella dormida como despierta, y recién levantada podía ser un cíclope cuando la miraba muy muy de cerca, las narices casi tocándose y la risa sostenida apenas con el roce de los pechos en el pecho de Remo y el insulto veloz porque se hace tarde pero mirá cómo estás, sí, me encanta, bueno bueno ay sí sí así.
Salieron, finalmente, a la calle hostil, llena de ruidos de motores, de cubiertas azotando adoquines, de humos infernales azotando los pulmones y un aire demasiado frío para ser verano y de mañana cuando los cuerpos deben separarse pero los pensamientos se quedan en ese cuerpo que se ve caminar despacito para un lado y el propio cuerpo tiene que irse para el otro lado hasta que el cuerpo número uno se da vuelta y ve que el cuerpo número dos sigue ahí mirando al cuerpo número uno, embobado, con la babita cayendo un poco así por la comisura de los labios, y entonces no queda más remedio que volver sobre los pasos y sorber esa babita con la punta de la lengua como un colibrí libando una flor, haciendo así con las alas rapidito para sostenerse en el aire.

jueves, 7 de julio de 2011

Situación de Calle

Esta mañana escuchaba a la candidata a vicejefe de Gobierno por la Ciudad de Buenos Aires hablar sobre la gente en "situación de calle".
Más allá del eufemismo, me vino enseguida al recuerdo un señor que siempre veo en la recova del Paseo Colón, en los días de lluvia o de frío. Generalmente está cerca de una agencia de autos alemanes muy elegantes, con un colchón y algunas pertenencias. Las tres o cuatro veces que lo vi, dormía, con la mano derecha entre la mejilla y la sien, y una sonrisa que podría decirse de satisfacción, como si estuviera en una cama king size en un cuarto calentito.
Pero lo que más me llama la atención es que tiene varios perros, que duermen tan satisfechos como él. Todos tienen su correa, y todos una mantita de esas que se les ponen a los perros de la Avenida Santa Fe, u otras por el estilo, que comen alimentos balanceados y acaso duermen en un sillón y andan hociqueando a los dueños y eventuales visitantes para robarles un mimo.
Tal vez estos perros intenten lo mismo, tal vez con suerte dispar, porque sabemos que no nos causan mucha gracia los perros de la calle de la gente en situación de calle (por así decirlo)
Lo que sí es cierto es que estos cachorros tienen todo el amor y el cuidado de este hombre, que teniendo tan poco, no deja de preocuparse por ellos, dándoles abrigo con sus mantas -que están en muy buen estado, además-, y seguramente les comparte  su comida, que no le debe resultar fácil conseguir.
Estuve tentado de sacarle una foto con mi smart phone, pero recapacité. Creo que no sería justo robarle esa su intimidad en su situación de calle, con su sonrisa y sus perritos y sus pocas sucias cosas.
Después de todo, estaba algo apurado porque tenía que volver a casa para resolver un problema con la estufa, que le cuesta prender y el frío es insoportable.

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